FIESTA DE LUCES
Dan. 8:13-14 – Juan 10:20-23
Introducción.
Una de las fiestas más coloridas que el pueblo de Dios celebra, se acerca en el calendario festivo del Señor. La fiesta de las luces.
Esta es una fiesta que fue imitada por el paganismo romano tradicional. Esta festividad constituye parte de nuestras raíces. Lo nuestro no son las novenas, Papa Noel, ni árboles. Lo nuestro es la fiesta de luces. Todo este paganismo fue introducido a la iglesia por el Concilio de Constantinopla en el 386 d. C. y las practicas paganas del mitraísmo del imperio romano.
El Profeta Daniel se anticipa a este tiempo de celebración. Que sería posterior a un tiempo de aflicción, sufrimiento y desolación. Una verdadera abominación desoladora. Un gentil que sería tipo del Anticristo, sería su protagonista. Pero Dios levantaría una familia de caudillos que serían los libertadores de su pueblo en ese tiempo. La familia macabea. El Señor siempre tiene un remanente fiel entre su pueblo al que usa como sus instrumentos en tiempos de angustia. Conozcamos las luces bíblicas de esta festividad:
I. SU HISTORIA
- Inicio del dominio gentil sobre el pueblo de Dios: Visión profética de Daniel 2-7-9. Babilonia, Medo Persia, Grecia, Roma
- La división del imperio Griego
- Seléuco Nicanor: Dinastía seléucida.
- Antíoco Epifanes IV: Profanó el templo del 171-165 a. C., prohibió observar el Shabat; cumplir la circuncisión y el estudio de la Toráh. Construyó un altar en el Templo y obligó a los judíos a presentar ofrendas a los dioses griegos, en especial una estatua de Zeus que había sido levantada para que fuera adorada. Un gimnasio fue construido cerca del Santo Templo y muchos jóvenes sacerdotes prefirieron el gimnasio a sus oficios sacerdotales. Jóvenes piadosos veían desnudos a otros jóvenes haciendo ejercicios físicos.
- La familia Macabea: Martillos de Dios se opusieron al Helenismo bajo el grito: “Mi Kamoja Baelim Adonai” Nadie es tan grande como tu entre los dioses Señor. Su nombre es tomado de las iniciales del eslogan Ma Ka BI.
- El templo fue recuperado por los macabeos:Judas y sus hombres, guiados por el Señor, destruyeron los altares que se habían levantado tanto en las afueras como dentro del Templo para ofrecer libaciones a dioses paganos.
- El milagro del aceite y la celebración: Ocho días duró el aceite en la menorah
II. SU NOMBRE
- Hanukka: Del verbo consagrar. es decir janú jaf kei ("descansaron el día veinticinco") pues el día 25 [de Kisleu] descansaron de la tiranía de sus enemigos
- Encenias: dedicación o renovación
- Dedicación: Purificación del templo de Jerusalén
- Luces o Luminarias: Por su origen divino y la costumbre de encender en las ventanas de las casas y en las sinagogas la menorah.
III. SU SIMBOLOGIA
- La palabra de Dios y la luz que ella irradia. Salmo 119:105
- El Mesías Jesús. Jn. 8:12
- La iglesia del Señor. (Menorah de Janukáh) Apoc. 1:10-13
- La luz del Reino milenial y eterno. (aspecto escatológico)
IV. SU APLICACIÓN Y SIGNIFICADO
- Los cristianos debemos hacer de esta fiesta una experiencia que haga parte de nuestra vida y costumbres
1. En contra del paganismo tradicional
2. En contra de la asimilación del mundo. Rom. 12:2
- La fiesta tiene un aspecto profético y escatológico con la reconstrucción y profanación del templo judío en los días del Anticristo. II Tes. 2:3-4
- La fiesta es un tiempo para hacernos regalos durante los ocho días de su duración.
1. Dios nos ha hecho grandes regalos
a. El mismo es nuestro mayor regalo (Dios trino)
b. Un universo único
c. Una tierra única
d. Su palabra
e. Una nación única. I Pedro 2:9
f. Un Mesías único
g. Una gloria eterna única
- ¿Cual es nuestro regalo para él? Deut. 16:16b-17
Conclusión:
Haga una ofrenda mesiánica para bendecir este año. Rom.12:1
Levante esta ofrenda en su hogar o Congregación y pida al Ministro de su Iglesia que la bendiga con la bendición de Hanukka.
Baruj atá, Adonai, Eloheinu, mélel haolam, asher kidshanu bemitzvotv vetzivanu lehadlik ner shel Januca. Baruj atá, Adonai, Eloheinu, mélej haolam, sheasá nisím laavoteinu bayamim hahém bazemán hazé. Mi Kamoja Baelim Adonai. Bendito eres Eterno Dios nuestro, Rey del universo, que nos has santificado con tus mandamientos, y nos ordenas encender las luces de Hanukka. Bendito eres Eterno Dios nuestro, Rey del universo, porque realizaste milagros para nuestros antepasados en aquellos días, en esta época. Bendito eres Eterno señor nuestro, Rey del universo, porque nos has concedido vida, nos has preservado, y nos has permitido llegar con vida a esta ocasión. Nadie es tan grande como tu entre los dioses oh Señor.